En un acto de gran repercusión mediática, el gobernador Martín Llaryora se erigió como uno de los líderes regionales en la lucha contra el cambio climático. Durante la primera Conferencia Climática Internacional, firmó un "Compromiso Regional" junto a sus pares de Santa Fe, Entre Ríos, La Pampa, Jujuy y Chubut. Las palabras resonaron con fuerza: "gobernanza multinivel", "transición energética justa", "proteger la biodiversidad".
"Nuestra mirada se dirige al ambiente, pero es también una mirada productiva. No somos negacionistas", aseguró Llaryora. Un discurso esperanzador que posiciona a Córdoba en la vanguardia de la agenda verde.
Sin embargo, mientras se firman estos compromisos en salones climatizados, una pregunta incómoda retumba en las sierras y valles de nuestra provincia: ¿Se condice este discurso con la realidad ambiental de Córdoba? 🤔 La respuesta, lamentablemente, parece contrastar de manera brutal con las buenas intenciones declaradas.
Las Rutas de la Polémica: ¿Progreso a Qué Costo? 🛣️💥
El "desarrollo" y el "progreso" son palabras que suenan bien, pero en Córdoba a menudo vienen acompañadas por el ruido de las topadoras arrasando el monte. Varios megaproyectos viales actuales y recientes ponen en jaque el supuesto compromiso ambiental del gobierno:
- Autovía de Punilla: Quizás el caso más emblemático. Un proyecto que, en su trazado, ha generado una enorme resistencia de asambleas ambientales y vecinos por atravesar zonas rojas de bosque nativo, reservas naturales y afectar cuencas hídricas fundamentales.
- Autovía de Calamuchita: Al igual que su par de Punilla, este proyecto avanza sobre ecosistemas frágiles, amenazando la poca flora y fauna que sobrevive en una de las zonas más castigadas por los incendios y el desmonte.
- Conexión La Calera - Malagueño: La planificación de esta nueva ruta en la zona del perilago San Roque vuelve a encender las alarmas. Se trata de un avance sobre una de las últimas áreas naturales cercanas a la capital, aniquilando la biodiversidad local para, teóricamente, agilizar el tránsito.
Estos proyectos, presentados como símbolos de progreso, son vistos por muchos como la materialización de una política que prioriza el cemento por sobre la vida.
El Bosque Nativo en Terapia Intensiva: Menos del 3% y en Peligro 🌳🔥
Aquí es donde el discurso choca de frente con la estadística más dura. El gobernador de La Pampa, Sergio Zillioto, destacó en el mismo evento que su provincia conserva el 80% de su bosque nativo. Una cifra que debería avergonzarnos.
En Córdoba, la situación es crítica: queda menos del 3% del bosque nativo original. Décadas de desmonte para expandir la frontera agropecuaria y desarrollos inmobiliarios sin control nos han dejado en una situación de extrema vulnerabilidad ambiental.
¿Cómo se puede hablar de "proteger la biodiversidad" y liderar una agenda climática cuando la provincia ha permitido una de las tasas de deforestación más altas del país en los últimos 20 años? Menos bosque significa menos capacidad para absorber carbono, suelos más pobres, mayor riesgo de inundaciones y la extinción silenciosa de nuestra fauna.
Un Discurso que se Contradice 🗣️↔️🚧
Resulta paradójico escuchar al gobernador afirmar que "seremos las provincias quienes vamos a representar al país en la COP (Conferencia de las Partes)", cuando las políticas internas parecen ir en la dirección opuesta a los consensos climáticos globales.
- Se habla de "proteger la biodiversidad", pero se aprueban trazados de rutas que fragmentan y destruyen los últimos corredores biológicos.
- Se menciona la "gobernanza multinivel", pero se desoyen sistemáticamente las advertencias y reclamos de las asambleas ciudadanas y comunidades locales que defienden su territorio.
- Se firma un compromiso por una "transición energética justa", mientras el modelo de desarrollo provincial sigue anclado en la expansión urbana y vial sobre ecosistemas nativos, lo que aumenta la huella de carbono.
¿Un Compromiso Real o un Brindis al Sol? ☀️🥂
La firma de este Compromiso Regional es, en el papel, una excelente noticia. Demuestra que la crisis climática está en la agenda política. Sin embargo, las acciones pesan más que las palabras.
Para que Córdoba sea un verdadero líder climático, el compromiso debe reflejarse en el Boletín Oficial, en la suspensión de proyectos depredadores y en una inversión real y contundente para restaurar nuestro devastado monte nativo.
Mientras tanto, este tipo de actos corren el riesgo de ser percibidos como lo que en criollo llamamos un "brindis al sol": un gesto para la foto que contrasta dolorosamente con la realidad que viven día a día nuestros ecosistemas. La pregunta queda flotando en el aire: ¿estamos ante un cambio de rumbo genuino o frente a una sofisticada campaña de greenwashing? El tiempo, y las topadoras, darán la respuesta.